En la calle estaban diciendo que iba un gigante hacia el castillo. Ton se asomó por la ventana y grito: ``yo he matado a siete´´
Todo el mundo se quedó asombrado, porque pensaban que había matado a siete gigantes.
El rey le pidió que fuera a matar al gigante. Él consiguió amarrarlo con un carrete de hilo. Cuando el rey vió al gigante amarrado, entregó la mano de su hija a Ton y se casaron.